Un pastel de patatas tierno, realzado por el chorizo ​​y suavizado por la mozzarella

1. Introducción

Hay ciertas combinaciones de ingredientes que, juntas, son pura magia. Patatas, queso, un toque de embutido español... son sabores que nos transportan directamente a la cocina de nuestras abuelas, a las comidas familiares de domingo o a esas cenas informales con amigos donde lo único que importa es disfrutar del buen comer. Este Pastel de Patatas con Chorizo y Mozzarella es precisamente eso: un abrazo en forma de plato, tierno por dentro, ligeramente dorado por fuera, y con una explosión de sabor casero que lo hace absolutamente irresistible.

La idea de un pastel salado a base de patatas ralladas es una variante fantástica de la clásica tortilla de patatas o del gratin dauphinois francés. Al rallar las patatas, conseguimos una textura increíblemente tierna y uniforme una vez horneadas, diferente al bocado de la patata en dados o láminas. Añadir el chorizo, ese tesoro de nuestra gastronomía, aporta un toque picante y ahumado inconfundible, que se ve maravillosamente equilibrado por la suavidad y la elasticidad de la mozzarella fundida. Es un plato humilde en sus ingredientes, pero rico en sabor y en esa calidez que solo la comida casera bien hecha puede ofrecer.

Este pastel es increíblemente práctico. Puedes prepararlo en un molde grande para cortar porciones, como si fuera un pastel dulce pero en versión salada, o hacerlo directamente en una fuente de horno rectangular para servir tipo cazuela. Es perfecto para una cena de diario acompañado de una ensalada fresca, transformando una comida sencilla en algo especial. Y si tienes pensado ir de picnic, ¡es el compañero ideal! Se transporta fácilmente y está igual de rico caliente que templado, lo que lo hace comodísimo para disfrutar al aire libre. Si buscas un plato único que sea fácil, económico, que guste a grandes y pequeños y que te haga sentir el calor del hogar en cada bocado, no busques más. Este Pastel de Patatas, Chorizo y Mozzarella está a punto de convertirse en uno de tus favoritos. Para otra opción de plato contundente donde el chorizo es protagonista, nuestro Potaje de Garbanzos con Chorizo es otro clásico español que no defrauda.

2. Resumen de la receta

Este plato se define como un pastel salado horneado, compacto y tierno, con una base de patatas ralladas a la que se incorporan ingredientes sabrosos y cremosos antes de ser cocinado al horno.

  • Tipo de Cocina: Española / Casera / Confort Food. Se basa en ingredientes muy populares en la cocina española y europea, con un enfoque en la sencillez y el sabor tradicional.
  • Nivel de Dificultad: Fácil. La preparación consiste en rallar patatas, picar algunos ingredientes y mezclarlo todo antes de hornear. No hay técnicas complejas implicadas.
  • Tiempo Total de Preparación y Cocción: 15 minutos (Preparación activa) + 40 a 45 minutos (Tiempo de cocción en horno) = Aproximadamente 55 a 60 minutos en total.
  • Raciones: 6 personas.
  • Clasificación Dietética: Contiene Carne/Cerdo (chorizo), Contiene Lácteos (mozzarella, nata), Contiene Huevo. No es un plato vegetariano, vegano ni naturalmente sin gluten (aunque los ingredientes principales suelen ser sin gluten, hay que verificar la etiqueta del chorizo y la mozzarella, ya que a veces pueden contener aditivos con gluten). No es sin lactosa.

Su facilidad y el uso de ingredientes comunes lo convierten en una opción muy accesible para cualquier cocinero casero, incluso con poco tiempo para dedicarse a la cocina.

3. Equipo y utensilios

Para preparar este delicioso pastel de patatas, no necesitarás ningún equipo especializado. Los utensilios son básicos y se encuentran en cualquier cocina bien equipada.

  • Tabla de cortar: Indispensable para picar la cebolla y cortar el chorizo en dados. Una tabla estable te permitirá trabajar con seguridad.
    • Especificaciones: Una tabla de tamaño mediano a grande será suficiente. Asegúrate de que esté limpia y no se mueva al cortar.
  • Cuchillo de chef o multiusos: Necesario para picar finamente la cebolla y cortar el chorizo en dados. Un cuchillo bien afilado facilita el trabajo y ayuda a obtener cortes limpios.
    • Especificaciones: Un cuchillo con una hoja de al menos 15 cm.
  • Économe (opcional): Si prefieres pelar las patatas con un économe en lugar de un cuchillo. Es más rápido y eficiente.
    • Especificaciones: Un économe de buena calidad.
  • Rallador: La herramienta clave para preparar la base de este pastel. Necesitarás un rallador para rallar las patatas y la mozzarella (si no la compras ya rallada).
    • Especificaciones: Un rallador de caja con el lado de agujeros grandes es ideal para las patatas. Para la mozzarella, puedes usar el lado de agujeros grandes o medianos. Si tienes un procesador de alimentos con disco rallador, también puedes usarlo para rallar las patatas y la mozzarella rápidamente. Si utilizas el procesador para las patatas, es aún más importante secarlas bien después.
  • Bol grande para mezclar: Donde combinarás las patatas ralladas con el resto de los ingredientes. Debe ser lo suficientemente grande para mezclar cómodamente sin que se desborde.
    • Especificaciones: Un bol con una capacidad de al menos 3-4 litros. El acero inoxidable, el vidrio o el plástico son buenos materiales.
  • Tazas y cucharas medidoras: Para medir la nata y los huevos, y para dosificar las hierbas, la sal y la pimienta. La nata es líquida, así que una jarra medidora con marcas de volumen también funciona.
    • Especificaciones: Tazas medidoras líquidas (para la nata) y cucharas medidoras estándar (para hierbas, sal, pimienta).
  • Molde para hornear: Aquí tienes varias opciones, dependiendo de cómo quieras presentar el pastel. Un molde redondo desmontable te permitirá desmoldarlo fácilmente para cortarlo como una tarta. Una fuente de horno rectangular clásica es perfecta si lo quieres servir directamente de la fuente.
    • Especificaciones:
      • Molde redondo desmontable: Idealmente de unos 20-24 cm de diámetro. La altura debe ser de al menos 5-7 cm para que el pastel tenga cuerpo.
      • Fuente de horno rectangular: Una fuente de unos 20x30 cm. La altura debe ser similar (al menos 5 cm).
    • Notas: Sea cual sea el molde que elijas, es crucial engrasarlo muy bien para que el pastel no se pegue. Puedes usar mantequilla, margarina o aceite en spray. Si usas un molde desmontable, puedes forrar la base con papel de horno además de engrasar los laterales.
  • Espátula o cuchara grande: Para mezclar todos los ingredientes en el bol y para verter la mezcla en el molde. Una cuchara de madera o una espátula resistente son adecuadas.
  • Prensa (opcional) o el dorso de una cuchara/espátula: Necesario para presionar bien la mezcla en el molde antes de hornear. Esto ayuda a que el pastel quede compacto y no se desmorone al cortarlo.

Tener todos estos utensilios limpios y listos antes de empezar te permitirá preparar la mezcla de este pastel de patatas de forma rápida y eficiente.

4. Sugerencias de presentación

La belleza de este Pastel de Patatas, Chorizo y Mozzarella reside en su sencillez rústica y su apariencia dorada al salir del horno. La forma de servirlo puede variar si usas un molde desmontable o una fuente clásica.

  • Recomendaciones de emplatado:
    • Si usas un molde redondo desmontable: Desmolda el pastel con cuidado una vez que se haya enfriado ligeramente (5-10 minutos fuera del horno). Puedes cortarlo en porciones, como si fuera una tarta, y servir cada porción en un plato individual. Esto muestra las capas (si son visibles) y la textura del pastel.
    • Si usas una fuente rectangular: Sirve directamente de la fuente en la mesa. Esto le da un toque más informal y casero. Simplemente corta porciones cuadradas o rectangulares con una espátula y sírvelas en los platos.
    • Servir caliente o templado: Este pastel es delicioso recién salido del horno, con la mozzarella aún elástica y el chorizo desprendiendo su aroma. También es excelente templado, lo que lo hace ideal para picnics o para llevar a casa de amigos. Si lo sirves templado, el corte será aún más limpio.
  • Ideas de guarnición: Aunque el pastel es un plato bastante completo, unas guarniciones simples pueden realzarlo.
    • Hierbas frescas picadas: Un poco de perejil fresco o cebollino picado espolvoreado por encima justo antes de servir aporta color y frescura.
    • Pimentón: Una pizca de pimentón dulce o ahumado sobre la superficie del pastel le da un toque visual extra y un ligero aroma español.
    • Un chorrito de aceite de oliva: Un fino hilo de aceite de oliva virgen extra sobre cada porción puede añadir un extra de sabor.
  • Guarniciones complementarias: Este pastel se acompaña muy bien con platos frescos que contrasten con su riqueza.
    • Ensalada verde simple: Una ensalada de lechugas variadas con tomate, cebolla morada y una vinagreta sencilla es el compañero clásico. Puedes buscar inspiración en nuestra Ensalada Citrica: Naranja, Nueces y Miel, que ofrece un contraste de sabores interesante.
    • Ensalada de tomate: Tomates maduros cortados en rodajas o gajos, con un poco de ajo picado, perejil, aceite de oliva y sal.
    • Pimientos del Piquillo: Unos pimientos del piquillo asados o en conserva, aliñados con ajo y perejil, son un acompañamiento español perfecto.
    • Pan crujiente: Un buen pan de campo o una baguette para acompañar.
    • Verduras asadas: Unos espárragos trigueros a la plancha o unas verduras al horno (pimientos, calabacín, berenjena).
  • Maridajes de vinos o bebidas: La riqueza del chorizo y el queso, junto con la base de patata, maridan bien con bebidas que tengan algo de cuerpo pero que sean refrescantes.
    • Vino tinto: Un vino tinto joven o de crianza media, con taninos suaves, marida bien con el chorizo y la patata. Un Rioja, Ribera del Duero joven o un Mencía.
    • Vino rosado: Un rosado seco y afrutado puede ser una opción más ligera, ideal si lo sirves templado o en picnic.
    • Cerveza: Una cerveza rubia tipo Lager, o una cerveza roja con un toque más maltoso, son excelentes compañeras para el chorizo y el queso.
    • Otras bebidas: Agua con gas, limonada casera.

Servir este pastel recién salido del horno, con la mozzarella aún un poco fundida y el aroma del chorizo impregnando el ambiente, es la mejor manera de disfrutar de todo su potencial reconfortante. Si buscas otro plato horneado donde la patata es protagonista, nuestra Tarta Tatin de Patatas y Cebollas Caramelizadas es una alternativa dulce-salada muy original.

5. Información nutricional

Este Pastel de Patatas, Chorizo y Mozzarella es un plato contundente, perfecto para una comida principal o un acompañamiento energético. Su valor nutricional refleja su naturaleza reconfortante y sabrosa. El cálculo que te doy es una estimación por porción, considerando que la receta entera se divide en 6 raciones.

  • Calorías por porción: Aproximadamente 300-350 kcal por ración (para 6 raciones).
    • Nota: Este valor es una estimación y puede variar dependiendo de varios factores: el tipo de chorizo utilizado (un chorizo ibérico curado tendrá más grasa que un chorizo de cocción más magro), el porcentaje de grasa de la nata (nata para cocinar ligera vs. nata para montar), si utilizas mozzarella fresca con más humedad o rallada seca, y la cantidad exacta de aceite que uses para engrasar el molde. Las cifras presentadas son aproximadas y buscan dar una idea general.
  • Distribución de macronutrientes (Estimación, puede variar):
    • Lipidos (Total Fat): Moderado a Alto. Aproximadamente 18-25 g por porción. Las grasas provienen principalmente del chorizo, la mozzarella y la nata. El huevo y el aceite para engrasar también aportan grasa. El perfil de grasas dependerá del tipo de chorizo y nata.
    • Glúcidos (Carbohydrates): Moderado. Aproximadamente 20-25 g por porción. Los carbohidratos provienen principalmente de las patatas. La cebolla y el chorizo también aportan una pequeña cantidad.
    • Fibra (Fiber): Bajo a Moderado. Aproximadamente 2-3 g por porción. Las patatas, especialmente si se conserva algo de piel (aunque para rallar se suele pelar), y la cebolla aportan fibra. La cantidad de fibra dependerá de la cantidad de patata y cebolla por ración.
    • Azúcares (Sugars): Bajo. Aproximadamente 2-4 g por porción. Incluye los azúcares naturales de las patatas, la cebolla y la nata. El chorizo y la mozzarella suelen contener muy pocos azúcares añadidos, si acaso.
    • Proteínas (Protein): Alto. Aproximadamente 15-20 g por porción. Las proteínas provienen de los huevos, el chorizo, la mozzarella y la nata. El huevo y el chorizo son fuentes significativas de proteína.
    • Sodio (Sodium): Alto. El contenido de sodio será significativo debido al chorizo (que es salado por naturaleza y para su curación/conservación), la mozzarella (que también contiene sal) y la sal añadida al gusto. Si estás controlando tu ingesta de sodio, tenlo en cuenta.
  • Información dietética relevante:
    • Contiene Carne/Cerdo, Huevo y Lácteos.
    • No apto para dietas vegetarianas, veganas o sin lactosa tal cual.
    • Generalmente sin gluten en cuanto a los ingredientes principales, pero siempre verificar etiquetas de chorizo y mozzarella si la certificación "sin gluten" es indispensable por motivos de salud (celiaquía).
    • Es un plato más denso en calorías y grasas comparado con una ensalada o un plato de verduras simple.
  • Posibles beneficios para la salud (considerando que es un plato de "confort food"):
    • Fuente de energía: Las patatas aportan carbohidratos que son una buena fuente de energía.
    • Fuente de proteína de calidad: Los huevos y el chorizo son buenas fuentes de proteína completa, importante para la reparación y construcción de tejidos.
    • Aporta calcio: La mozzarella y la nata contribuyen al aporte de calcio.
    • Vitaminas y minerales: Las patatas contienen potasio y Vitamina C. La cebolla aporta algunas vitaminas. Las hierbas frescas aportan nutrientes y antioxidantes en pequeñas cantidades.
    • Satisfacción: Como plato reconfortante, contribuye a la sensación de bienestar y satisfacción, importante para una relación saludable con la comida.

Este pastel es ideal para ocasiones en las que se busca un plato sabroso y nutritivo, sabiendo que aporta una buena cantidad de calorías. Disfrutado con moderación y acompañado de una guarnición ligera, puede formar parte de una comida equilibrada y muy placentera.

6. Almacenamiento y recalentamiento

Una de las grandes ventajas de este pastel es que se conserva muy bien y se recalienta de maravilla, lo que lo convierte en un plato ideal para preparar con antelación o para disfrutar como sobras en los días siguientes.

  • Instrucciones de almacenamiento adecuadas: Una vez que el pastel se haya enfriado completamente a temperatura ambiente (esto es importante antes de guardar), cúbrelo bien. Si lo hiciste en una fuente, puedes cubrir la fuente con papel de aluminio o film transparente, o transferir el pastel a un recipiente hermético. Si lo hiciste en un molde desmontable y lo desmoldaste, guárdalo cortado en porciones o entero en un recipiente hermético.
  • Instrucciones de refrigeración: Guarda el pastel bien cubierto o en recipientes herméticos en el refrigerador a una temperatura de 4°C (40°F) o menos. Se conservará bien durante 3 a 4 días. La textura de las patatas ralladas se volverá más firme una vez fría.
  • Recomendaciones de congelación: Este pastel se congela bastante bien, lo que es genial si quieres preparar porciones individuales o tener una comida lista para otro momento.
    • Para congelar, deja que el pastel se enfríe completamente después de hornearlo. Puedes congelar el pastel entero (si el molde es apto para congelación y está bien envuelto en film transparente y luego papel de aluminio resistente) o, lo que es más práctico, cortar el pastel ya horneado y enfriado en porciones individuales y envolver cada porción muy bien en film transparente y luego papel de aluminio, o colocarlas en recipientes o bolsas herméticas aptas para congelación.
    • Se conserva en el congelador durante 2 a 3 meses para una mejor calidad. La textura de las patatas ralladas puede volverse un poco más harinosa o ligeramente alterada después de la congelación y descongelación, pero el sabor seguirá siendo bueno.
  • Métodos de recalentamiento:
    • En el horno (recomendado para mantener la textura y el exterior dorado): Recalentar en el horno es la mejor opción para que la superficie vuelva a estar un poco crujiente y el interior se caliente de manera uniforme sin que las patatas se vuelvan demasiado blandas. Precalienta el horno a 160-180°C (325-350°F). Si es un pastel entero o una porción grande, cúbrelo con papel de aluminio para evitar que se dore en exceso mientras se calienta el centro. Recalienta durante 15-30 minutos o hasta que esté caliente en el centro. Las porciones individuales tardarán menos.
    • En el microondas (opción rápida para porciones individuales): El microondas es la forma más rápida de recalentar una porción individual. Coloca la porción en un plato apto para microondas y calienta durante 1-3 minutos, o hasta que esté caliente, girando a mitad de tiempo. Ten en cuenta que el microondas ablandará la textura de las patatas ralladas y la superficie no recuperará su dorado crujiente.
    • Para recalentar desde congelado, es mejor descongelar la porción en el refrigerador durante la noche antes de recalentar en el horno o microondas. Si lo recalientas directamente desde congelado en el horno, tardará bastante más y deberás mantenerlo cubierto con papel de aluminio durante gran parte del tiempo.

Poder guardar y recalentar este pastel significa que puedes disfrutar de su delicioso sabor y su calidez casera en varias comidas, o tener una opción rápida y nutritiva lista en el congelador.

7. Consejos y variaciones de expertos

Convertir este simple pastel en algo extraordinario a veces depende de pequeños detalles. Aquí tienes algunos consejos para que te quede perfecto y algunas ideas para darle tu toque personal o adaptarlo a diferentes gustos.

  • Consejos de chefs profesionales:
    • Seca muy bien las patatas ralladas: Este es quizás el consejo más importante. Después de rallar las patatas, exprímelas bien con las manos o envuélvelas en un paño de cocina limpio y aprieta para retirar la mayor cantidad de agua posible. El exceso de humedad hará que el pastel quede acuoso y no tan compacto.
    • Elige el tipo de patata adecuado: Para un pastel tierno que se mantenga unido, una patata con un contenido de almidón medio o incluso ligeramente más alto puede funcionar bien. Las patatas para cocer (tipo Monalisa, Kennebec) suelen ir bien porque se mantienen un poco al hornear. Evita las patatas muy harinosas si quieres que mantenga un poco más su forma rallada, o patatas muy nuevas y acuosas.
    • No ralles las patatas con mucha antelación: Las patatas ralladas se oxidan y ennegrecen rápidamente al contacto con el aire. Rállalas justo antes de mezclarlas con los otros ingredientes para mantener su color fresco.
    • Corta el chorizo en dados pequeños: Esto ayuda a distribuir el sabor del chorizo uniformemente por todo el pastel. Si los dados son demasiado grandes, el sabor se concentrará en bocados específicos.
    • Queso de calidad para fundir: La mozzarella es excelente por su elasticidad al fundir. Usar mozzarella fresca (bien escurrida y rallada) o rallar mozzarella en bloque de buena calidad suele dar mejor resultado de fundido que algunas mozzarellas pre-ralladas que contienen antiaglomerantes.
    • Prensa para compactar: Tómate un minuto para presionar firmemente la mezcla en el molde antes de hornear. Esto ayuda a eliminar bolsas de aire, a que los ingredientes se adhieran bien entre sí y a que el pastel tenga una estructura sólida que no se desmorone al cortarlo.
    • El punto de dorado: No tengas miedo de dejar que la superficie se dore bien en el horno. Una capa exterior dorada aporta sabor y textura, contrastando con el interior tierno. Es una señal de que el pastel está bien cocido.
  • Errores comunes que se deben evitar:
    • Pastel acuoso: Principalmente por no escurrir suficiente agua de las patatas ralladas.
    • Pastel que se desmorona: No usar suficiente huevo o nata, o no presionar bien la mezcla en el molde. También puede ser por el tipo de patata.
    • Superficie que se dora demasiado rápido: Si el pastel se dora muy rápido por arriba pero aún no está cocido por dentro, cúbrelo ligeramente con papel de aluminio durante el resto del tiempo de cocción.
    • Sacar el pastel demasiado pronto del horno: Si la superficie no está bien dorada y el interior aún no está completamente firme, se desmoronará al intentar cortarlo.
    • Pastel soso: No sazonar con suficiente sal y pimienta. La patata rallada necesita un buen punto de sal.
    • Pastel demasiado graso: Usar un chorizo excesivamente grasiento y no añadir suficiente ligazón (huevo, nata, queso) para ayudar a absorber esa grasa.
  • Variaciones creativas de recetas:
    • Otros embutidos o carnes: Sustituye el chorizo por jamón serrano picado, taquitos de bacon crujiente, salchichón en dados pequeños, o incluso restos de pollo asado desmenuzado. Si te gusta cocinar con jamón, quizás te interese nuestro Gratinado de Coliflor, Patatas, Queso y Jamón.
    • Otros quesos: Usa otros quesos rallados que fundan bien, como Gruyère, Emmental, Cheddar. Una mezcla de quesos también funciona. Puedes añadir un poco de queso Parmesano rallado a la mezcla o espolvorear por encima para un sabor más intenso y salado.
    • Añadir verduras: Sofríe finamente una cebolla morada o unos ajetes picados antes de añadirlos a la mezcla para un sabor más dulce. Incorpora pimientos rojos o verdes picados y salteados. Champiñones salteados y picados. Espinacas cocidas y muy bien escurridas y picadas. Calabacín rallado y muy bien escurrido (como las patatas).
    • Añadir ajo: Un diente de ajo picado muy finamente añadido a la mezcla dará un toque extra de sabor.
    • Cambiar las hierbas: Usa otras hierbas frescas o secas que te gusten, como orégano, romero picado, tomillo.
    • Extra crujiente: Espolvorea un poco de pan rallado o panko sobre la superficie antes de hornear para obtener una capa extra crujiente.
    • Pastel por capas: En lugar de mezclar todo, puedes intentar hacer capas: una capa de patata rallada (ligada con huevo y nata), una capa de chorizo y cebolla, una capa de mozzarella y un poco de nata, otra capa de patata, y así sucesivamente, terminando con queso. Esto requiere que la patata rallada esté muy bien ligada con huevo y nata en cada capa. Este concepto de pastel en capas con patata recuerda mucho a nuestra Tarta Tatin de Patatas o a nuestro Pastel Invisible de Batatas y Parmesano. Para otra idea de gratinado con patatas y queso, no te pierdas nuestro Gratinado de Coliflor, Patatas, Queso y Jamón.
  • Adaptaciones estacionales: Este pastel, con sus ingredientes contundentes y calientes, es especialmente reconfortante en los meses más fríos. Sin embargo, su versatilidad como plato para compartir o de picnic lo hace apto para cualquier estación. Las hierbas frescas que elijas pueden reflejar la temporada.

Explorar estas variaciones te permitirá disfrutar de este pastel de patatas de muchas maneras, adaptándolo a los ingredientes que tengas y a tus preferencias. Si te gustan los platos con chorizo, nuestro Potaje de Garbanzos con Chorizo es otra opción de plato único y contundente.

8. Sección de ingredientes

La calidad de cada ingrediente, por simple que sea, es fundamental para el resultado final de este pastel casero.

  • 700 g de patatas ralladas: Son la estructura y el cuerpo principal del pastel, aportando textura y cuerpo.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 700 gramos / aproximadamente 1.54 libras / unas 5-6 patatas medianas.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Elige patatas firmes y sin brotes. Para este tipo de pastel, las patatas de tipo 'cocción' o 'multiusos' funcionan bien porque mantienen un poco su forma al hornear sin volverse puré. Evita las patatas excesivamente harinosas si no quieres que quede demasiado compactado.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Puedes usar boniato (batata) rallado para una versión más dulce, aunque el sabor cambiará significativamente. Para un sabor similar pero diferente, podrías usar chirivía (pastinaca) rallada, pero su sabor es más anisado.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Lava muy bien las patatas para quitar toda la tierra. Pélalas si lo deseas (es lo más común para rallar). Rállalas usando el lado de rallado grueso o mediano de tu rallador. Inmediatamente después de rallarlas, colócalas en un paño de cocina limpio o en una estameña (gasa). Envuelve las patatas ralladas y exprímelas firmemente sobre el fregadero o un bol para extraer la mayor cantidad de líquido posible. Cuanto más agua quites, menos aguado quedará el pastel. No las dejes reposar una vez ralladas y escurridas antes de mezclar.
  • 2 huevos: Actúan como el aglutinante principal, uniendo las patatas ralladas y aportando riqueza y una textura tierna al pastel horneado.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 2 unidades de tamaño grande (L).
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Elige huevos frescos.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: No hay un sustituto directo y sencillo que replique la función y el sabor de los huevos en este contexto. Para una versión vegana, esta receta requeriría cambios muy significativos (usar un puré de lino/chía o un sustituto de huevo a base de almidón como ligante principal y adaptar otros ingredientes).
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Romper los huevos en el bol antes de añadir a las patatas.
  • 100 g de chorizo cortado en dados: Aporta el sabor intenso, especiado y ligeramente graso que es el alma de este pastel. El chorizo se cocina y libera su sabor al hornear.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 100 gramos / aproximadamente 3.5 onzas.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Puedes usar chorizo fresco para cocinar o un chorizo curado que no sea excesivamente seco. Elige uno que te guste, ya sea dulce o picante. Un buen chorizo español marcará la diferencia. Cómpralo en una charcutería o supermercado.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Panceta (bacon) ahumada cortada en dados pequeños y quizás ligeramente salteada para que suelte algo de grasa antes de añadir a la mezcla. Jamón serrano picado. Otros embutidos similares pero con sabor diferente.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Corta el chorizo en dados pequeños de aproximadamente 0.5 a 1 cm para que se distribuyan bien en toda la preparación y se cocinen uniformemente durante el horneado. No necesitas cocinar el chorizo previamente, ya que se cocinará al hornear en el propio pastel.
  • 100 g de mozzarella rallada: Aporta cremosidad y ese efecto elástico tan agradable al fundirse. Ayuda a ligar los ingredientes y forma una capa deliciosa en la superficie.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 100 gramos / aproximadamente 3.5 onzas / aproximadamente 1 taza (rallada).
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: La mozzarella especial para rallar (menos húmeda) es muy práctica. Si usas mozzarella fresca (en bola), escúrrela muy bien antes de rallarla o picarla, ya que tiene más humedad que podría afectar la textura. Rallar tú mismo un bloque de mozzarella suele dar mejores resultados de fundido.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Otros quesos que fundan bien como Emmental, Gruyère, Cheddar suave, o una mezcla de quesos.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Rallar la mozzarella si no la compraste ya rallada.
  • 1 cebolla picada: Aporta un sabor aromático y una ligera dulzura que complementa el resto de los ingredientes. Se ablanda y se integra en la textura del pastel al hornearse.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 1 cebolla de tamaño mediano.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Cebolla blanca o amarilla. Elige una firme y sin brotes.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Puerro (la parte blanca) picado finamente para un sabor más suave. Escalotas picadas para un sabor más delicado y dulce.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Pica la cebolla lo más finamente posible para que se cocine bien dentro del pastel y se distribuya uniformemente sin encontrar trozos grandes y crudos.
  • 10 cl de nata (light o entera): Aporta la cremosidad necesaria para que el interior del pastel sea tierno y húmedo, ligando todos los ingredientes. La elección entre nata para cocinar (ligera, 15-18% grasa) o nata para montar (entera, 30-35% grasa) dependerá de cuánto quieras que el pastel sea indulgente.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): 10 centilitros / 100 mililitros / aproximadamente 0.4 tazas líquidas / 3.4 onzas líquidas.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Nata líquida específica para cocinar o montar.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Leche evaporada para una textura cremosa similar con menos grasa. Leche entera si no tienes nata (el pastel será menos rico y cremoso, y puede que necesite un poco más de queso o huevo para ligar bien). Una crema vegetal (soja, avena, coco) podría usarse en una versión vegana con otros sustitutos, pero el sabor lácteo se perdería.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Medir con precisión usando una jarra medidora líquida.
  • Hierbas (perejil, cebollino, tomillo, etc.): Añaden un toque de frescura y un aroma herbal que corta la riqueza y aporta complejidad al sabor del pastel.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): Al gusto. Aproximadamente 1-2 cucharadas soperas de hierbas frescas picadas, o 1-2 cucharaditas de hierbas secas.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Las hierbas frescas (perejil picado, cebollino, un poco de tomillo o romero) aportan un sabor más vibrante. Si usas secas, opta por tomillo, orégano o una mezcla de hierbas provenzales.
    • Posibles sustituciones de ingredientes: Usa las hierbas que prefieras o que tengas a mano.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Si usas frescas, lávalas, sécalas bien y pícalas finamente justo antes de añadir a la mezcla. Si usas secas, puedes frotarlas ligeramente entre los dedos antes de añadirlas para liberar su aroma.
  • Sal, pimienta: Para ajustar el sazón de la mezcla de patatas antes de hornear. Es fundamental para realzar todos los sabores.
    • Cantidad (Métricas e Impériales): Al gusto. Es difícil dar una cantidad exacta sin probar, ya que la salinidad del chorizo y la mozzarella varía. Empieza con quizás 1/2 cucharadita de sal y 1/4 cucharadita de pimienta negra recién molida. Puedes probar una pequeña cantidad de la mezcla cruda (sin el huevo) para ajustar si te sientes cómodo, pero ten en cuenta la seguridad alimentaria si decides probarla cruda (aunque los demás ingredientes son seguros crudos, el huevo no lo es). Es más seguro ajustar al servir si tienes dudas.
    • Recomendaciones de calidad y abastecimiento: Sal fina o sal de mar. Pimienta negra recién molida para mejor sabor.
    • Notas sobre la preparación de los ingredientes: Añadir al bol con las patatas y otros ingredientes base.

Contar con todos estos ingredientes listos para mezclar, especialmente habiendo preparado adecuadamente las patatas ralladas (¡recordar escurrir!), hará que el montaje del pastel sea muy rápido.

9. Instrucciones paso a paso

La magia de este pastel ocurre en el horno, donde la mezcla simple de ingredientes se transforma en una tarta dorada y tierna. Sigue estos pasos para una preparación exitosa.

  1. Preparación de los ingredientes y del molde (aproximadamente 10 minutos):
    • Precalienta el horno: Ajusta la temperatura de tu horno a 180°C (350°F) con calor arriba y abajo si es posible. Un horno bien caliente desde el inicio asegura una cocción uniforme.
    • Prepara las patatas: Lava muy bien 700 g de patatas, pélalas y rállalas con un rallador grueso. Inmediatamente, coloca las patatas ralladas en un paño de cocina limpio o en una estameña (gasa). Envuelve las patatas ralladas y aprieta con todas tus fuerzas para extraer la mayor cantidad de líquido posible. Este paso es crucial para evitar un pastel aguado.
    • Pica la cebolla: Pica finamente 1 cebolla mediana.
    • Corta el chorizo y ralla la mozzarella: Corta 100 g de chorizo en dados pequeños (0.5-1 cm). Ralla 100 g de mozzarella si es en bloque.
    • Engrasa el molde: Engrasa generosamente un molde para hornear (redondo desmontable de unos 20-24 cm o rectangular de unos 20x30 cm) con mantequilla o aceite. Asegúrate de cubrir bien el fondo y los laterales para que no se pegue. Si usas un molde desmontable, puedes poner un círculo de papel de horno en la base además de engrasar.
  2. Mezclar todos los ingredientes (aproximadamente 5 minutos):
    • Combina los ingredientes base: En un bol grande, pon las patatas ralladas y bien escurridas, los 2 huevos, los 10 cl de nata líquida, la cebolla picada, las hierbas (1-2 cucharadas frescas picadas o 1-2 cucharaditas secas), sal y pimienta al gusto. Mezcla con una cuchara o espátula hasta que todo esté bien integrado y las patatas estén cubiertas por la mezcla de huevo y nata.
    • Añade el chorizo y la mozzarella: Incorpora los dados de chorizo y la mozzarella rallada al bol.
    • Mezcla suavemente: Vuelve a mezclar, esta vez con movimientos suaves, solo para distribuir el chorizo y la mozzarella uniformemente por toda la preparación de patatas.
  3. Montar y hornear el pastel (aproximadamente 1 minuto para montar + 40-45 minutos de horneado):
    • Vierte en el molde: Vierte toda la mezcla en el molde engrasado.
    • Presiona firmemente: Usa el dorso de una cuchara o espátula para presionar y compactar bien la mezcla en el molde. Asegúrate de que la superficie quede lo más lisa y uniforme posible y que los bordes estén bien rellenos.
    • Hornea: Introduce el molde en el horno precalentado a 180°C (350°F).
    • Tiempo de cocción: Hornea durante 40 a 45 minutos. El pastel estará listo cuando la superficie esté bien dorada y los bordes se separen ligeramente del molde o se vean firmes. Si usas un molde de cristal, podrás ver si los laterales también se han dorado ligeramente. Si no estás seguro, puedes insertar un palillo en el centro (aunque no saldrá completamente seco debido al queso y la nata). La clave es que esté dorado y que se sienta firme al presionar suavemente la superficie. Si la parte de arriba se dora muy rápido, cúbrelo con papel de aluminio para evitar que se queme antes de que el interior esté listo.
  4. Enfriar ligeramente y servir (aproximadamente 5-10 minutos antes de servir):
    • Reposo: Retira el pastel del horno y déjalo reposar en el molde durante 5 a 10 minutos antes de intentar desmoldarlo o cortarlo. Este tiempo de reposo permite que los jugos se redistribuyan y el pastel se asiente, facilitando el corte y manteniendo su forma.
    • Servir: Corta en porciones y sirve el pastel caliente o tibio. Es delicioso solo o acompañado de una ensalada fresca. ¡Disfruta de cada bocado!

Siguiendo estas instrucciones, crearás un pastel de patatas casero que es a la vez simple y espectacular, perfecto para cualquier ocasión donde se celebre la buena comida.

10. Preguntas frecuentes (FAQ)

Es normal tener algunas dudas al probar una nueva receta, incluso una tan sencilla como esta. Aquí respondo a las preguntas más comunes sobre el Pastel de Patatas, Chorizo y Mozzarella para que te sientas totalmente preparado.

  • P: ¿Qué tipo de patata es mejor para este pastel?
    • R: Las patatas de tipo 'cocción' o 'multiusos' (como Monalisa, Kennebec, Spunta) son ideales. Tienen el equilibrio justo de almidón para que el pastel se mantenga unido sin volverse apelmazado. Evita las patatas muy harinosas o las patatas nuevas muy acuosas.
  • P: ¿Es realmente necesario escurrir las patatas ralladas?
    • R: Sí, es crucial. Las patatas ralladas crudas contienen mucha agua. Si no la eliminas, esa agua se liberará durante el horneado, resultando en un pastel aguado, menos compacto y menos sabroso. Exprimir bien las patatas con un paño es un paso clave para el éxito.
  • P: ¿Puedo usar mozzarella fresca (en bola) en lugar de rallada seca?
    • R: Sí, puedes usar mozzarella fresca, pero deberás escurrirla muy bien antes de rallarla o picarla para eliminar el exceso de humedad. La mozzarella fresca tiene más agua que la mozzarella para rallar seca, y demasiada agua en la mezcla arruinaría la textura del pastel. El resultado de fundido puede ser un poco diferente.
  • P: ¿Qué tipo de chorizo recomiendas?
    • R: Depende de tu gusto. Un chorizo fresco para cocinar o un chorizo curado de 'herradura' que no sea excesivamente seco funcionan muy bien. Si te gusta el picante, usa chorizo picante. Si prefieres un sabor más suave, opta por chorizo dulce. La calidad del chorizo impactará directamente en el sabor final del pastel.
  • P: ¿Puedo preparar la mezcla con antelación?
    • R: No es recomendable preparar la mezcla completa (patatas ralladas mezcladas con el resto de ingredientes) con mucha antelación, ya que las patatas ralladas crudas se oxidan y sueltan agua rápidamente una vez mezcladas. Lo ideal es rallar y exprimir las patatas justo antes de mezclar con el resto de ingredientes y hornear. Sí puedes picar la cebolla, cortar el chorizo y rallar el queso con antelación y guardarlos por separado en el refrigerador.
  • P: ¿Se puede congelar este pastel?
    • R: Sí, se congela muy bien una vez horneado y enfriado. Puedes congelar el pastel entero o en porciones individuales. Envuelve muy bien para evitar que se queme con el frío. Se conserva 2-3 meses. Para descongelar, pásalo al refrigerador la noche anterior y luego recalienta en el horno para obtener la mejor textura.
  • P: ¿Puedo añadir otras verduras a la mezcla?
    • R: Sí, puedes añadir otras verduras finamente picadas a la mezcla, como pimientos rojos o verdes salteados, champiñones salteados, o espinacas cocidas y muy bien escurridas y picadas. Es importante que las verduras que añadas no aporten exceso de humedad.

Espero que estas respuestas resuelvan tus dudas y te animen a probar y disfrutar de este delicioso y sencillo Pastel de Patatas, Chorizo y Mozzarella.

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